Antonio Hidalgo fue uno de los presentadores de moda de los 90, pero hace casi dos décadas desapareció de la televisión nacional. El madrileño decidió alejarse del ruido de las grandes cadenas y del imparable ritmo de la capital española para afincarse en Murcia, lugar donde vive una vida tranquila junto a su mujer y centrado en su programa diario del canal autonómico.
El presentador triunfó en 1998 gracias a protagonizar las tardes de Antena 3 junto a Ana Rosa Quintana. Hidalgo se coló durante 7 temporadas en las casa españolas gracias a Sabor a ti, que se convirtió en uno de los programas con más éxito de la sobremesa. Así, el madrileño pasó a ser uno de los rostros más conocidos de la televisión española y a la que volvió tras casi 14 años alejado.
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Antonio Hidalgo se convirtió en el inesperado fichaje de Quintana para su nuevo programa de las tardes. El exitoso tándem, que arrasó a principios de los 2000, volvió a la televisión casi dos décadas después de su última aparición juntos. Antes, el madrileño volvió a la televisión nacional a través de Fiesta para presentar una sección de vídeos virales en las redes sociales durante el programa presentado por Emma García.
Su vida alejada de la televisión nacional
Tras el éxito con Sabor a ti, Hidalgo participó en El Club de Flo o fue jurado de ¡Mira quién baila! Sin embargo, el presentador decidió hacer las maletas y mudarse a Murcia hace 14 años para alejarse del ruido televisivo. "En 2008 tomé una de las decisiones más bonitas de mi vida, que fue salir de mi zona de confort", afirmó a principios de este año en declaraciones de Pronto. Así, el presentador pasó a ser uno de los rostros habituales del canal autonómico y comenzó una vida "más saludable".
Hidalgo también confesó al citado medio que "el dinero me lo gasto en viajar, en disfrutar y ser feliz". Algo que se veía demostrado en cada tarde en el canal murciano al presentar Ailoviu, el programa de 7RM para la sobremesa. Además, el presentador también confesó la razón por la que decidió alejarse del foco mediático y centrar en una cadena pequeña.
"La televisión es una pequeña trituradora que utiliza a las personas que en un momento dado conectan con el espectador, e igual que apareces llega un momento en el que te vas fuera. Yo ya no tenía mucho más recorrido en las televisiones nacionales. Pero es que nunca pretendí trabajar en televisión. A mí todo me vino regalado. Y sinceramente, no creo que sirva para este trabajo, pero me ha tocado hacerlo", reconoció Hidalgo al citado medio.
Hidalgo califica su recorrido televisivo como "un regalo que me hizo la vida, pero no me lo merezco". Y, 14 años después, Telecinco le volvió a dar una oportunidad en una cadena nacional y junto a su gran amiga Ana Rosa Quintana.