Los juguetes de Toy Story tienen vida desde 1995, mismo año en el que sus personajes supusieron un antes y un después en la evolución del mundo de la animación. Cuatro años después, John Lasseter logró que Woody y Buzz Lightyear regresasen para descubrir el furor que existía por el vaquero en los años 50. Y, cuando nadie esperaba que hubiese una tercera historia, el equipo de Pixar sorprendió a todos sus fans desarrollando una cinta que hizo sufrir a más de uno al exponer a todos sus protagonistas ante el fuego. Esta lacrimógena sorpresa parecía el final perfecto para la franquicia que ha crecido y madurado a la vez que sus seguidores, por lo que no es de extrañar que muchos se muestren reticentes ante la idea de volver a ocupar una butaca del cine para ver Toy Story 4. En SensaCine hemos tenido la oportunidad de ver media hora de la nueva película de Disney·Pixar y, tras ver que parte de la nostalgia al terror más puro, te contamos qué nos ha parecido (sin demasiados 'spoilers').
Lo primero que debe valorarse a la hora de analizar si la Casa de Mickey Mouse debía arriesgarse a extender la saga con una cuarta entrega es si no están faltos de ideas. El reconocido productor Jonas Rivera (Toy Story, Up, Del Revés (Inside Out) ha sido el encargado de viajar hasta la Academia de Cine de Madrid para hablar sobre la decisión de llevar esta cinta a cabo. "Nos gusta pensar que hemos trabajado en un final con Toy Story 3, pero esta saga representa la historia de Woody y él tiene mucho más que contar. Debemos pensar qué pasa por su cabeza, qué piensa y cuáles son sus preocupaciones", explica antes de proyectar varias escenas inéditas que recogen distintos retos y que demuestran que los fans de la franquicia todavía tienen mucho que conocer de Bonnie, Bo Peep, Rex y de decenas de personajes nunca vistos.
EL USO DE 'FLASHBACKS' Y LA TRÁGICA HISTORIA DE BO PEEP
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Toy Story 4 se estrena en las salas de cine de España el 21 de junio, nueve años después de que Lee Unkrich (Coco) jugase con el corazón de los espectadores en la tercera entrega. Esta nueva historia ha pasado a manos de Josh Cooley, quien debuta en la dirección de largometrajes con este gran reto, y quien ha conseguido comenzar la película jugando con los sentimientos de los fans una vez más. El uso de los 'flashbacks' en la primera media hora de la cinta hace que regresemos a la habitación de Andy, de su hermana pequeña Molly y al jardín donde los juguetes se separan de su dueño para unirse a la colección de muñecos de Bonnie. Pero, sobre todo, hace que queramos derrochar más de una lagrima al conocer la historia que separa a Bo Peep de Woody y Buzz, el verdadero motivo por el que no participa en Toy Story 3.
Lejos de revelar demasiados 'spoilers' es importante señalar que la partida de la pastorcilla no decepciona y que, antes de dejar atrás a sus amigos, se las arregla para enseñar una lección vital al vaquero: a todo juguete le llega la hora de separarse de su niño y eso es bueno. "Ella es lo que siempre ha temido Woody: un juguete perdido", explica Rivera antes de asegurar que "es el corazón y la emoción de esta película. Annie Potts tuvo que cambiar la forma de hablar del personaje para interpretarla de nuevo". Tras el distanciamiento de ambos, no se volverán a encontrar hasta que el protagonista divisa la lámpara en la que solía sostenerse Bo Peep en una tienda de antigüedades, la que, según el productor, representa "uno de los 'sets' más complejos nunca creados en Pixar".
LOS TERRORÍFICOS Y MÁS ADULTOS NUEVOS JUGUETES
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Dentro de esa tienda de antigüedades nos encontramos con algunos de los juguetes más conseguidos y más terroríficos de Disney·Pixar. Dejando atrás al malvado y, a la vez, adorable Lotso, ahora Woody tendrá que enfrentarse a la inquietante Gabby Gabby (Christina Hendricks), una muñeca que está "perdida en el tiempo" y que proviene de la misma época y fábrica que el vaquero. Aunque este debería ser un elemento de unión entre ambos, su origen hace que las cosas se compliquen aún más y que llame a sus esbirros, unos muñecos de ventrílocuo nada amigables, para protagonizar una de las escenas más oscuras de la trayectoria de la compañía. Y si Woody pasa miedo en ese fragmento, prepárate para quedarte con la boca abierta y las uñas clavadas a la butaca del cine.
Por supuesto, Toy Story no es una saga de terror y, entre los nuevos personajes, siempre se encuentran nuevos compañeros que deseamos que formen parte de los ya conocidos toda la vida. Keegan-Michael Key y Jordan Peele ponen voz a Ducky y Bunny, los graciosos peluches de feria que no paran de reírse de Buzz en los adelantos de la película. "Llevan años ahí encerrados y nunca han jugado con un niño, por eso están enfadados", profundiza Rivera al recordar que están unidos por una de sus patas y que nunca se han separado. También existe Forky (Tony Hale), una cuchara tenedor rescatada de la basura que no tiene muchas ganas de vivir; Giggle McDimples (Ally Maki), una pequeña Polly Pocket que no se separa de Bo Peep; y, entre otros, Duke CaBoom (Keanu Reeves), una figura de acción canadiense que solo sabe posar y cambiar de postura mientras habla.
BO PEEP, BUZZ Y JESSIE: ¿DÓNDE ESTÁN AHORA?
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Es imposible mantener en secreto que Bo Peep aparece con un aspecto completamente renovado en la película, pues es la protagonista de todos los adelantos. La pastorcilla volverá a aparecer junto a sus tres ovejas más valiente y aventurera que nunca y podría llegar a convertirse en uno de los personajes favoritos de muchos de los fans de la saga. Durante sus años fuera de la casa de Andy, ha aprendido a sobrevivir ante los peligros que conlleva no tener un niño, enfrentarse a los riesgos de un parque infantil e incluso a los planes de malvados juguetes que no tienen ningún reparo en secuestrar o torturar a otros. Bo Peep tiene ahora una personalidad fuerte y un pensamiento que dista mucho de la forma de vivir de Woody. Esto puede hacer que el vaquero cambie toda su concepción sobre la vida y tome decisiones que le separarán del resto.
¿Qué ocurre con Buzz, Jessie, Rex y el grupo original? Mientras Woody se va de viaje con la familia de Bonnie acompañado de Forky, el grupo se da cuenta de que el protagonista no regresa y de que deben ir en su búsqueda -repitiendo así la fórmula de las anteriores películas. Por ello, Buzz consigue trazar un plan que le llevará volando hasta la feria donde se convierte en un preso junto a Ducky y Bunny. Cabe destacar que las tramas del largometraje vuelven a contar con Randy Newman. El compositor de 'Hay un amigo en mí' ha creado dos nuevos temas que permanecen en completo secreto.
"La primera entrega trata sobre un juguete perdido; la segunda, sobre un juguete roto; la tercera, reflexiona sobre qué pasa si tu niño crece; y, la cuarta, habla sobre qué pasaría si abandonan su habitación", señala Jonas Rivera antes de negar que "la animación sea para niños". Por eso y mucho más creemos que sí, Toy Story 4 es un riesgo asumido por Pixar que merece la pena explorar y que esperamos que guarde muchas otras escenas terroríficas y riesgos que no se tomaron en los anteriores títulos. ¡"Hasta el infinito y más allá"!
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