Os he de hacer una confesión: uno de mis mayores crushes cuando era joven e impresionable era Claire Danes. La conocí en la serie Es mi vida, en la que perdía los papeles por el personaje de Jordan Catalano, interpretado por un jovencísimo Jared Leto. La serie era magnífica: trataba a los jóvenes como seres complejos y no meras hormonas con patas. Tenía personajes LGBT y era muy seria, muy adulta. En España pudo verse en Canal+ y actualmente en ninguna plataforma. Una pena.
Es mi vida fue el primer papel importante para Claire Danes. Y fue todo un éxito. Dos años después, la directora australiana Gillian Armstrong la eligió para ser una de las Mujercitas en una nueva versión en la que también aparecían Winona Ryder, Kristen Dunst, Samantha Mathis y Susan Sarandon, entre otras. Sin embargo, fue dos años más tarde, en 1996, cuando la Danes comenzó a empapelar el cuarto de millones de adolescentes confusos al interpretar a Julieta en la adaptación inmortal de la novela de William Shakespeare de Baz Luhrmann junto a Leonardo DiCaprio, cuando tenía la edad de todas sus actuales novias: Romeo + Julieta.
Luego, sin embargo, su carrera no ha destacado especialmente hasta la llegada de Homeland, serie en la que recuperó un poco de su gloria perdida. ¿Malas decisiones al elegir sus proyectos? Puede ser. De lo que estamos seguros es que rechazar Titanic no fue una de sus mejores ideas. Aunque ella, a día de hoy, no se arrepiente lo más mínimo.
Efecitivamente, Claire Danes, en la cresta de la ola, la Julieta por la que suspiraban millones de jovencitos y jovencitas en todo el mundo, tuvo la oportunidad de negarse a compartir tabla con un DiCaprio a punto de morir congelado. Sin embargo, rechazó el papel. Así lo recuerda la actriz en una entrevista en el podcast Armchair Expert y que recoge Vanity Fair:
Recuerdo que Leo y yo compartíamos mánager por aquel entonces y estábamos en su oficina. Yo estaba en un balcón, como si fuese la propia Julieta y él estaba dando vueltas en círculos en el parking. Yo sabía que él estaba decidiendo si participar en 'Titanic' o no. Me miró y me dijo: 'Lo voy a hacer”, sí, lo voy a hacer
La actriz, sin embargo, no estaba preparada para ello. “Tenía ganas de nuevas experiencias artísticas y Titanic me parecía una repetición". Y decimos que no se arrepiente de haberse negado, porque lo que más temía Danes es que la película se convirtiera en un taquillazo y ella, por consiguiente, en una megaestrella: "No tenía los recursos para lidiar con esa situación. Sabía que tenía que construir antes cimientos sólidos". Spoiler: a Kate Winslet no le ha ido tan mal, después de todo.
Danes está tranquila por haber rechazado el papel. En 1998, por ejemplo, en el estreno de El hombre la máscara de hierro (estrenada un año después de Titanic) todo el mundo estaba pendiente de DiCaprio. "Cuando entró en la sala, todo el mundo se fue hacia él. Fue algo terrorífico. Y creo que pude haber sentido que estaba acercándome a esa misma situación y elegí no hacerlo".
