Si te doy 5 minutos para que pienses en estrellas de Hollywood mundialmente famosas es muy probable que una de las que aparezca por tu cabeza sea Chris Evans. El actor ha pasado una década interpretando a Capitán América en la pantalla grande y muchos lo consideran uno de los grandes nombres de la industria cinematográfica. Sin embargo, él asegura que no "ha alcanzado ninguna cima en el mundo del cine". Pertenece a la gran franquicia audiovisual de la actualidad, pero prefiere centrarse en otros aspectos de su vida y lo cierto es que sus mejores papeles están muy lejos de Marvel.
Uno de esos trabajos que le definió como un intérprete completo y competente es Snowpiercer, de Bong Joon-ho. Esta película surcoreana de ciencia ficción es un hito en su filmografía pero casi la rechaza porque no la entendía muy bien.
Para comprender bien por qué Chris Evans no entendía del todo la historia, hay que contar un poco el argumento de la cinta. Snowpiercer se ambienta en un futuro apocalíptico en el que, en un intento por combatir el calentamiento global, los humanos han causado una nueva edad de hielo y han extinguido gran parte de la vida del planeta. Los únicos que quedan con vida son los pasajeros del Snowpiercer, un tren gigantesco que viaja a través del mundo.
El tren se divide por estratos sociales. Los más pobres viajan en la cola y los más privilegiados están en los primeros vagones. Los que van en la parte trasera están preparando una revolución, dado que sus condiciones son paupérrimas. El personaje de Evans, Curtis Everett, es el líder de la revuelta.
Cuando leí el guión por primera vez, no lo entendí del todo. Yo estaba como, 'Y... ¿qué?' Siempre que se trata de una película que construye un mundo, estás creando un entorno completamente separado. Hay una especie de presunción de que tienes que decir: 'Está bien, ¿entonces todo el mundo acepta esto así es como es? ¿Nadie está un poco indignado de que esta sea la estructura? Esa es la norma, está bien
"Es un desafío", continúa explicando el actor en una entrevista con GQ, "pero puedes ver a Tilda Swinton en la película y ver su increíble aproximación a este personaje". Después de dejar de cuestionar el universo que planteaba el cineasta, Evans pudo disfrutar del proyecto y está agradecido de haber dicho que sí. "El director Bong es un visionario. Cuando trabajas con alguien que sabe exactamente lo que quiere, incluso si no es exactamente como tú lo viste, genera confianza".
Good Films
Por suerte, el actor supo encontrar el valor del proyecto y sumó a su carrera una de sus películas con mayor puntuación. De hecho, dado que se estrenó en 2013, fue una de las primeras películas que le desligó por completo del mundo superheroico de Marvel. Después vendrían otros proyectos que también le han servido para afianzarse como un actor más serio. Ahí está la serie Defending Jacob (2020) o la película Puñales por la espalda (2019), de Rian Johnson.
Tarantino cree que Marvel ha cambiado el concepto de estrella de Hollywood y Chris Evans le da la razón: "No tienes que ser el centro"Evans siempre tendrá el impacto popular que le ha proporcionado Marvel -y con eso está muy agradecido- pero en esa misma entrevista con GQ aseguró estar de acuerdo con Tarantino cuando afirmó que los actores de las películas del estudio no son estrellas de cine. "Eso era lo bonito de trabajar en las películas de Marvel. Realmente no tenías que ser la fachada y el centro. Incluso en tus propias películas a veces. Quentin Tarantino lo decía recientemente y yo pensé: 'Tiene razón'. El personaje es la estrella. Tú estás allí, pero no te sientes la carga de ello", añade Evans.
