Han pasado 16 años desde el fundido a negro que hizo historia en la pequeña pantalla y, desde entonces, las producciones televisivas han experimentado un enorme auge. No obstante, entre las brillantes series de televisión que hemos podido disfrutar en la última década hay algunas ficciones inolvidables que se mantienen intactas en cualquier listado de las mejores de la historia. Y Los Soprano es una de ellas.
Desarrollada por David Chase para el prestigioso canal de cable HBO y estrenada por primera vez en 1999, Los Soprano estaba protagonizada por James Gandolfini en el papel del ya mítico Tony Soprano, un capo de la mafia y padre de familia italiana residente en Nueva Jersey en cuyo día a día no faltan todo tipo de acciones criminales como extorsión, tráfico ilegal y sobornos. Además, su vida familiar tampoco es precisamente un paseo: por un lado no tiene una buena relación con sus hijos, su madre y su hermana lo manipulan, y otros miembros de su familia amenazan su liderazgo en la banda. En este contexto, una serie de ataques de ansiedad le llevan a pedir ayuda psiquiátrica.
Emitida durante seis temporadas entre 1999 y 2007, Los Soprano es ampliamente reconocida como una de las series más brillantes e importantes de todos los tiempos y, aunque su desenlace -que reunió a más de 12 millones de espectadores ante la pantalla solo en Estados Unidos- generó bastante controversia en su día, con el paso del tiempo también se ha ganado su propio hueco en la historia.
Tras su desenlace, millones de fans quedaron huérfanos y, aunque la posibilidad de hacer una secuela fue descartada desde el principio -y más aún tras la triste muerte de James Gandolfini en 2013-, los planes para hacer una precuela fueron ganando peso con el paso del tiempo. Según parece, David Chase ya había fantaseado mucho antes de Los Soprano con una película sobre cuatro hombres que, tras conseguir evitar que les enviasen como soldados a la Guerra de Vietnam, se vieron en el centro de los disturbios de Newark en 1967, pero nunca llegó a realizarla. Una vez Los Soprano había sido un éxito, el crador de la también serie de HBO Oz, Tom Fontana, sugirió al 'showrunner' que escribiese una historia sobre el padre de Tony, pero Chase lo descartó por completo para dedicarse a otros proyectos.
Sin embargo, 10 años después de haber descartado por completo cualquier tipo de regreso, cuando los millones de fans que Los Soprano había logrado amasar en todo el mundo ya no esperaban de vuelta a la famosa familia, Chase confesó en 2017 su interés en una precuela ambientada en los años 60, que le permitiese explorar la infancia de Tony Soprano y, al mismo tiempo, regresar a esa idea que había tenido nada más salir de la escuela de cine sobre los disturbios de Newark.
El resultado fue Santos criminales, una película producida por New Line Cinema y HBO Films, que el propio Chase coescribió con Lawrence Konner y que fue dirigida por Alan Taylor, uno de los directores más habituales de Los Soprano. La película, estrenada en cines hace ahora dos años en 2021, se emitirá en abierto hoy de la mano de La 1 de RTVE, a las 22.05 horas.
En la película Michael Gandolfini, el hijo de James Gandolfini, es el encargado de meterse en la piel de un joven Tony Soprano, mientras que también son parte del elenco Vera Farmiga y Corey Stoll como la madre de Tony, Livia, y Junior, su tío favorito. Lo completan Billy Magnussen como Paulie Gualteri, John Magaro como Silvio Dante, Jon Bernthal como Giovanni Soprano, y Alessandro Nivola como Dickie Moltisanti, el padre de Christopher Moltisanti, entre otros.
'Santos criminales': cuando Tony Soprano, solo quería ser TonyEn Santos criminales seguimos los pasos de Tony Soprano en pleno paso a la madurez durante uno de los periodos más agitados de Newark, coincidiendo con los disturbios fruto de las tensiones entre las comunidades italianas y negras de la zona que se produjeron en 1967. Un tiempo en el que el protagonista comienza a relacionarse con la mafia a través de su admirado tío, al tiempo que la todopoderosa familia criminal DiMeo ve amenazada su hegemonía en la ciudad.
La película fue objeto de buenas críticas en su día, pero comercialmente no logró remontar sus 50 millones de presupuesto. No obstante, gozó de una buenísima salud en su vida en 'streaming' como parte del catálogo de HBO, hogar incuestionable de la familia Soprano.
