The Walking Dead: episodios de la temporada 11

A su regreso a Alejandría, tras varias jornadas en busca de comida, el grupo de supervivientes es consciente de que lo conseguido es escaso y pronto volverán a estar en las mismas. Maggie plantea una solución, que a priori podría poner en riesgo su vida y la de sus compañeros. Pero cree que es la única opción que les queda para conseguir volver a levantar los cimientos de su antiguo hogar, sino quieren ver como se acerca el fin de sus días. El primer día de viaje, las cosas se complican cuando se desata una tormenta que les obliga a ocultarse en un túnel bajo tierra. Los nervios provocan que el pánico se apodere de todos ellos, al mismo tiempo que empiezan a ser conscientes de la terrible situación a la que se enfrentaron Maggie y el grupo antes de volver a Alejandría.

Tras avanzar en el túnel consiguen refugiarse en el interior de un vagón de metro. Pronto descubren que no están todos y que uno de ellos ha debido encontrar algún contratiempo por el camino, algo que enseguida les hace pensar en Negan como responsable. El nuevo lema es seguir adelante pase lo que pase; atrás quedó el “ningún hombre se queda atrás”. Y más aún cuando sospechan que los caminantes les pisan los talones. Con este escenario de fondo, Daryl se enfrenta, además, a su propio infierno mientras trata de dar con el paradero de Dog, al mismo tiempo que Yumiko empieza a desafiar al resto de sus compañeros.

El grupo de supervivientes encabezado por Maggie sigue sufriendo, y después de haberse dividido, sus integrantes deben enfrentarse a los temibles Reapers (Segadores), a quienes no se les conoce por su amabilidad precisamente. Por un lado, Carol, Magna, Kelly y Rosita ponen todo su esfuerzo en conseguir caballos para Alejandría; mientras que Judith, RJ, Gracie y Hershel tratan de adaptarse a la marcha de sus padres.

Los Reapers se han convertido en una de las peores amenazas para el grupo. Tanto es así que consiguen capturar a Daryl y a Dog, dejando tocado al resto de los integrantes, quienes temen por su vida. Ambos son llevados al Meridiano, donde sin esperarlo, volverán a tener contacto con una misteriosa persona de su pasado.

La trama sigue con varios frentes abiertos. Por un lado, Aaron, Carol, Lydia y Jerry deciden poner rumbo a las ruinas de Hilltop con el propósito de hallar herramientas para poner herraduras a los caballos. El grupo de Eugene inicia su andadura hacia la Commonwealth. Todo ello, mientras Maggie y Negan siguen perdidos en mitad del bosque, y Judith y los niños se las verán con los adolescentes.

Tras conseguir librarse de los caminantes, Connie y Virgil consiguen encontrar refugio en una misteriosa casa. No tardan en descubrir que no están solos, y que en ella habitan unas extrañas criaturas. Por su parte, Pope quiere poner a prueba la lealtad de Daryl frente a Los Reapers (Segadores) con una misión que hace aguas; y Kelly decide huir de Alejandría para buscar a Connie.

En Promesas rotas, el grupo encabezado por Eugene hará a los caminantes pagar por el daño causado. Por su parte, Maggie y Elijah pondrán a prueba una nueva técnica de supervivencia junto a Negan. Mientras, Yumiko intenta acceder a un trabajo cualificado, y Daryl empieza a conocer más detalles sobre Leah y Los Reapers (Segadores).

La integridad del Meridiano de Los Reapers (Segadores) corre peligro ante un ataque, que a ojos de Pope podría haber sido organizado por Maggie. Por su parte, los habitantes de Alejandría temen ser atacados por los caminantes después de una fuerte tormenta.