Como en la vida misma, aunque probablemente entre un poco más de 'glamour', las grandes personalidades de Hollywood no se libran de protagonizar algunos malos rollos. Al igual que entre diferentes actores, directores y otras figuras de la industria es bien sabido que se forjan estrechas amistades que duran para toda la vida, también ocurre lo contrario, que en determinado momento y por la razón que sea acaba surgiendo algún tipo de enemistad y animadversión.
En la mayoría de las ocasiones estas historias no trascienden al conocimiento público, pero a lo largo de la historia se ha sabido de numerosos 'feuds', y Ryan Murphy incluso hizo una serie antológica sobre este tema, entre estrellas.
Uno de los enfados más famosos de Hollywood lo protagonizaron en su día el afamado cineasta Danny Boyle y el conocido actor Ewan McGregor, quienes se habían hecho grandes amigos durante el rodaje de la película de 1994 Tumba abierta, ópera prima del director en pantalla grande, y consagraron su amistad en Trainspotting (1996).
Danny Boyle también eligió a McGregor como protagonista en su tercera película, Una historia diferente, que coprotagonizó junto a Cameron Diaz en 1997, pero, cuando el director se puso manos a la obra con La playa y eligió a Leonardo DiCaprio para interpretar el papel principal, su amistad con Ewan McGregor se fue al traste. Tanto que dejaron de hablarse durante toda una década.
Aunque a priori no debería ser un motivo de enfado que el director que te ha elegido como protagonista en tres de sus películas se decante por otro actor para otro proyecto en particular, con el estreno de T2 Trainspotting en 2017, en la que ambos volvían a trabajar juntos, supimos un poco más de lo ocurrido casi 20 años atrás. Y lo que ocurrió es que, como asume el propio Boyle, manejó todo aquello bastante mal. "Muy, muy mal", en sus propias palabras, puesto que le dio la impresión a McGregor de que sería el protagonista de La Playa para luego elegir a DiCaprio.
"Lo manejé muy muy mal y me he disculpado contigo. Me sentí muy avergonzado por ello. No estoy orgulloso de la forma en que lo manejé", admitió cara a cara con McGregor en The Graham Norton Show. "Me arrepiento de que se alargase tanto" le contestó el actor, apenado por los años de amistad perdidos. "Es una vergüenza que no trabajásemos juntos todos esos años. No fue por La Playa en sí, sino por nuestra amistad y yo sentí que había estado en las tres primeras películas de Danny y que no estaba en la cuarta y eso me descolocó. No lo entendí y no hablamos por demasiado tiempo, lo que fue un desperdicio".
La reconciliación entre ambos no llegaría hasta 2009, cuando McGregor entregó un premio a Boyle en los BAFTA y le dedicó un bonito discurso.
Curiosamente, el 'beef' entre Boyle y McGregor no terminó demasiado bien para nadie, especialmente para Leonardo DiCaprio, que con La Playa obtenía su primer gran papel tras el megaéxito de Titanic, y la recepción de su trabajo fue bastante tibia.
De hecho, la película es considerada una de las peores que ha protagonizado a lo largo de su carrera y le costó algunos años y otras oportunidades para demostrar que era un actor como la copa de un pino y no solo un ídolo adolescente. Igualmente, para Boyle La playa tampoco es uno de sus mejores 'hits'. Al fichar a DiCaprio como protagonista, el director recibió 50 millones de dólares más, pero él mismo reconoció en 2013 en Moviefone que el hecho de que la película fuese de gran presupuesto había condenado su resultado. De hecho, el título es el peor valorado de Boyle en Rotten Tomatoes con un 21% de puntuación de la crítica y un 57% de la audiencia.
