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    Es uno de los detalles más angustiosos de 'Dahmer', pero desgraciadamente muy real (y atormentó a su vecina durante décadas)
    Alicia P. Ferreirós
    Desde los crímenes más sonados hasta famosos sucesos de la crónica negra española. Siempre con rigor y calidad, pero también un poco de ‘WTF’.

    En la comentada serie de Netflix protagonizada por Evan Peters en la piel de "el caníbal e Milwaukee" se incluyen algunas escenas tan sobrecogedoras que pensar que fuese real nos pone los pelos de punta.

    Dahmer, la serie de Netflix sobre el infame asesino en serie estadounidense Jeffrey Dahmer, no es la única ficción que se ha llevado a cabo sobre la historia del 'serial killer' conocido como "el caníbal de Milwaukee", pero sin duda la interpretación de Evan Peters y la forma de narrar la historia de Ryan MurphyIan Brennan la convierten en una de las más sobrecogedoras series sobre crímenes que reales que hemos visto jamás. La historia real tiene parte de la "culpa", puesto que lo que hizo Jeffrey Dahmer es absolutamente salvaje, pero el ritmo pausado de la serie que carga el relato de una tensión constante y la forma de reflejar y transmitir al espectador el terror que sentían las víctimas al darse cuenta que estaban ante su asesino es absolutamente estremecedor.

    A lo largo de los 10 episodios de DAHMER - Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer, asistimos a varias escenas capaces de encogerte el estómago: la tensión de la primera -que en realidad fue la última- víctima cuando Dahmer le dice que se va a comer su corazón; el sonido del taladro que se oye a través de los conductos de ventilación de su vecina cuando Konerak Sinthasomphone es devuelto con su asesino por la propia policía; o el encuentro en la casa de Glenda Cleveland (Niecy Nash) en la que Dahmer le ofrecía un sandwich.

    DAHMER - Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer
    DAHMER - Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer
    Fecha de estreno 2022-09-21 | 60 min.
    Series : DAHMER - Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer
    Con Evan Peters, Richard Jenkins, Penelope Ann Miller
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    Streaming

    Sin embargo, lo verdaderamente sobrecogedor de la miniserie de Netflix es que es rigurosamente fiel a la historia de Jeffrey Dahmer. Desde su forma de captar a sus víctimas, hasta las terribles prácticas que llevaba a cabo con ello y lo que hacía después con sus cadáveres. Murphy y Brennan se han tomado algunas licencias pero, en su mayoría, cada pequeño detalle que forma parte de Dahmer viene de todo lo que sabemos sobre una historia que acaparó tanta atención mediática que se hizo rabiosamente famosa.

    Tras su detención, en el apartamento de Jeffrey Dahmer se encontraron numerosos restos humanos en la cocina y el en frigorífico y también encontraron un enorme barril con restos deshaciéndose en ácido, diversos botes con órganos y varias calaveras. Tal y como se ve en la serie, los vecinos del asesino se habían quejado en varias ocasiones del inosportable hedor que emanaba de su apartamento, que él siempre aseguró que se trataba de carne caducada. Sin embargo, no sospechaban de él tan abiertamente como Glenda Cleveland, sino que no le prestaban demasiada atención.

    'Dahmer': Qué es real, qué no y qué se ha dejado fuera la brillante miniserie de Netflix sobre el infame asesino caníbal

    De hecho, su vecina de al lado no era Glenda, sino otra mujer llamada Pamela Bass que se menciona en la serie pero nunca llega a salir. Cleveland por su parte también existió, pero se trataba de una vecina del edificio contiguo que atestiguó el incidente de Konerak Sinthasomphone y los creadores decidieron combinar las historias de ambas en un mismo personaje. Respecto a Pamela Bass, la vecina puerta con puerta del monstruo de Milkaukee, hace años que aportó su testimonio a la película documental The Jeffrey Dahmer Files de Chris James Thompson, relatando un encuentro con Dahmer que la había perseguido durante décadas. 

    Y lo que contó Bass es, sin lugar a dudas, uno de los momentos más escalofriantes de la serie de Netflix. Cuando Jeffrey visita a Glenda para que retire su queja sobre él y le ofrece un sándwich de carne que insiste en que se coma. Ella no lo hace, pero, según contó la verdadera Pamela Bass, ella sí comió lo que le ofreció Dahmer. Al parecer, la mujer se hizo durante un tiempo amiga del joven, porque parecía solitario y muy tímido y, según recoge Daily Mail, Bass cree que podría haber consumido carne humana sin saberlo y ese pensamiento la acompañó cada día de su vida.

    "Probablemente me he comido la parte del cuerpo de alguien", admitía Bass en la película sobre su peor miedo después de que aquel hombre que entonces le parecía amistoso le diera aquel sándwich. "No pasa una semana sin que [la Sra. Bass] piense en esto", decía Thompson el autor de la cinta documental sobre el relato que había compartido con ellos Bass. "'Imagina ser vecino de alguien que está matando y comiendo gente a unos metros de distancia de donde tú duermes".

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