Dos amantes descansan en la cama después de haber tenido relaciones sexuales -suponemos, porque no se ve-. Ella está tapada hasta el cuello y él deja su torso al aire. Hablan tranquilamente sobre su futuro y los problemas de su día a día. Es una escena que encontraríamos en cualquier serie occidental y que algunos llegarían incluso a tachar de inocente, ya que los dos tienen mucho cuidado de que no se les vea nada más de lo necesario. Pero en Turquía ha generado un gran revuelo.
Netflix
Esa secuencia tiene lugar en el episodio 6 de Club Estambul, la nueva serie turca de Netflix que llegó a su catálogo el 5 de noviembre. Protagonizada por Gökçe Bahadir, Baris Arduç y Asude Kalebek, entre otros, la ficción generó mucho interés. No solo por su elenco, también por tratarse de una producción original de la conocida plataforma de 'streaming', que se atreve a hacer cosas como ésta.
Desde que se emitió, han sido muchos los medios turcos que han destacado la escena, sorprendidos de que los dos protagonistas apareciesen de esa guisa. "Las escenas atrevidas y ambiciosas de la serie suscitan gran repercusión en redes sociales", anuncia Onedio, igual que Hurriyet, que dedica un artículo a la escena en cuestión y publica las imágenes que han causado "ruido" en internet. "Lo que marcó la primera temporada fue el amor entre los personajes de Fistik İsmet y Rasel", define el medio.
Sexo, alcohol, adulterio y personajes LGBT: lo que censuran en las series turcas¿Por qué se está hablando tanto de ese momento? Porque las series turcas no suelen mostrar encuentros en la cama y, mucho menos, con sus actores sin camiseta. Quizás recuerdes la multa que le cayó al equipo de Love is in the air por haber mostrado a Eda (Hande Erçel) y Serkan (Kerem Bürsin) en una cita apasionada dentro de un jacuzzi. Si has visto la serie y haces memoria, seguramente encuentres problemas para recordarles con poca ropa. La desnudez se castiga y, por supuesto, el sexo también.
Cualquier contenido que pueda ir en contra de las tradiciones familiares turcas o los valores sociales es censurado o, en el mejor de los casos, penado mediante pago de una multa. El sexo o la desnudez no son los únicos temas controvertidos, también lo es, por ejemplo, el adulterio. La serie Infiel también fue sancionada por normalizar las relaciones extramatrimoniales. A ojos del RTUK -el Consejo Supremo de Radio y Televisión-, son un mal ejemplo" porque crean "modelos a seguir que pueden afectar negativamente a los jóvenes y los niños.
Club Estambul no ha sido sancionada, pero es una de las pocas que se ha atrevido a mostrar una realidad más auténtica en las relaciones de pareja. Lo ha hecho gracias al amparo de Netflix que, a pesar de que está sometida a las mismas reglas, siempre va un paso por delante de las cadenas más tradicionales.
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